¿Cómo quieres que te quiera?

¿Cómo quieres que te quiera?

Por: Emy Miranda

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Foto: Luciendo musculosa Como quieres.

stá claro que en un vínculo amoroso entre dos personas suceden muchas cosas -enamorarse, pelear, sufrir, reconciliarse, volver a amar- . Y es que en el campo  del amor existen varias formas de querer y demostrar el afecto.

Mientras que algunos hombres prefieren agasajar a su ser especial mediante flores, cartas o bombones; otros, aún más tímidos, eligen demostrar su afecto a través de acciones. ¿Por ejemplo? Recogerte a la salida de un difícil día laboral, o una caricia delicada en el rostro, o bien un simple, pero elocuente, “te amo”

en el momento indicado.

Lo cierto, es que en mi caso personal, mi “chico de ojos café” fusiona ambas partes afectivas. Me lo demuestra con gestos románticos que, aunque muchas lo consideren un cliché o cursis, me encantan. Y también, con actitudes que, sin duda, afirman el afecto que me tiene.

El principal hecho que hace referencia a ese amor incondicional, y uno de los más relevantes, es al momento de acompañarme a comprar mi hermosa indumentaria. Y sí, chicas, debemos reconocer lo complicada que somos a veces, con nuestras indecisiones y “crisis de moda”.

Foto: De compras en Unicenter.

Recorrer las mejores tiendas del shopping una y otra vez, probarnos la ropa y zapatos unas cinco veces, salir del local y luego volver, al arrepentirnos de no haber comprado “eso” que nos dio miedito usar. Y como si fuera poco, sometemos a presión a nuestros novios con la típica pregunta incómoda – y muy retórica- : “¿Cómo me queda?”.

De esa forma, la semana pasada, mi alto galán, de un metro noventa con su reluciente outfit de Desigual, me acompañó a la colorida y juvenil etiqueta “Como quieres que te quiere”, en la sucursal del shopping Unicenter que, como muchas de sabrán, es prácticamente mi segundo hogar.

Allí, una hermosa musculosa, tipo top, de lentejuelas negras y con una impronta tan elegante como atrevida, me deslumbró por completo desde la despampanante vidriera. Y es que, como siempre expreso en mis columnas, lo más importante es identificarte con la prenda que adquieras. Debe reflejar tu gusto personal.

Así, luego de comprarme unos cinturones (accesorio por demás importante en cualquier outfit) y otra remera muy veraniega, me despedí de la tienda junto a mi “chico de ojos café”. Quien me demostró que, si puede soportar mi histeria fashionista, nuestro futuro juntos va por buen rumbo.

Cambios necesarios

Tiempo de evolución

Por Emy Miranda

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Foto: Campera: Prune, Musculosa top: Como quieres.

n la vida de cualquier persona, existen ciertos momentos o circunstancias que producen la evolución, más resplandeciente y necesaria, del mismo ser. Así también, se dice que en el mágico mundo de la moda, lugar donde los colores y la libertad juegan al crear nuevos diseños, todo se repite pero de forma reinventada.

Ahora bien: ¿Algo les suena familiar? ¿Acaso no pasa lo mismo con las personas? ¿Quién puede afirmar que sus pensamientos y convicciones son exactamente igual a la de años anteriores? Y es que el paso del tiempo, nos enseña que se puede aprender mucho de los “tropezones” o caídas.

De esta manera, la semana pasada, este ser extravagante y fashionista, evolucionó. Luego de casi perder una relación sana y amorosa (he aquí mi ausencia de casi un mes), me di cuenta que, hasta la persona más segura, puede tropezarse y caer de forma rotunda.

Así me di cuenta en un corto periodo que, tanto los asuntos del corazón como la reinvención de la moda, no están del todo distantes. Es decir, en mi opinión, ningún traje Chanel, aún cuando tenga la seda más delicada y la piel más colorida, o aunque tenga las perlas y accesorios más costosos, se lucirá de manera adecuada sino estas acompañada por tu chico ideal.

Foto: Zpatos y cartera: Prune, Collar: Complot. 

Y es que considero que el amor, pese a los tragos amargos que nos haga pasar, es lo más importante en la vida de cualquier ser humano. Mientras que la moda, otro de mis pilares fundamentales, se encontrará vacío sino estoy con él. Y en ese momento lo deduje: ¡Amor y moda van de la mano, chicas!

En un estado de ruptura, todo es deprimente, incoloro e inerte. Ni mis zapatos favoritos de Ricky Sarkany podían incitarme a mover mis pies y salir de la cama.

Por dicho motivo, me reinventé. Al igual que la legendaria Ave Fénix, resurgí de las cenizas para volar, una vez más, junto a mi “chico de ojos café”. El único ser en la Tierra que logra que todos mis oufits tomen color y luzcan como yo quiero.

Compras de primavera

La primavera y su Moda

Por: Emy Miranda

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Foto: Con cartera Prune.

uego de los nostálgicos e inertes fríos de la estación invernal, la primavera dio inicio mediante ese típico sol resplandeciente que, si bien no llega a calentarnos lo suficiente para usar remeras, nos permite usar tapados de piel, con una prenda liviana debajo. ¡Mi momento favorito del año!

Lo cierto, es que en este periodo romántico, donde las flores, plantas y árboles renacen, la moda no se queda atrás. Como un ave fénix que resurge aún con más fuerzas, esta temporada llegó con todo. ¿Cuáles son las etiquetas que no podés dejar de visitar si querés lograr un look muy chic?

La primera en mi lista chicas: Prüne. Sí, no importa en qué año nos encontremos, las prendas de esta marca nunca pasan de moda. Y este año los diseños, tanto en sus espléndidas carteras como en sus camperas y zapatos prometen y mucho. Una manera sabia de invertir el límite de tus tarjetas de crédito.

Otras etiquetas que nunca se quedan atrás en diseño son: Vitamina, Ayres, Akiabara y Tucci. Con estilos bien definidos, es muy probable que encuentres algo con lo que te identifiques.

Para aquellas personas que cuenten con tarjetas de crédito en rojo, producto de desastres financieros previos a las liquidaciones invernales (yo me considero dentro de la lista), les recomiendo que visiten Zara y Falabella (con marcas respetables como Basement, Sybilla o Americanino) donde encontraran una buena propuesta con increíbles descuentos en bancos.

Foto: Zapatos, tapado y cartera, Prune.

Ahora bien, el punto importante para todas y todos (y no es que este imitando a la presidenta CKF, sino que en el último periodo cierto accesorio se convirtió en un punto muy importante para el género masculino): los zapatos. Sí, morimos por ellos y somos capaces de endeudarnos si vemos ese par que nos “voló la cabeza”. En cuento a marcas, como siempre recomendaré para el público femenino osado: Ricky Sarkany. Con diseños extravagantes y altas plataformas y tacos, su calzado es mi preferido. Como también la etiqueta Nazaria, que con precios aún más accesibles promete una gama de colores llamativos (como me gustan a mí) y de muy buena calidad.

En cuanto a los chicos, no pierdan la oportunidad de observar las vidrieras de la línea de Casella Uomo, que dejando de lado el típico modelo aburrido de zapato tradicional, se la juega por una extravagante pero, a la vez, elegante propuesta. Como también, no dejen de visitar la boutique de Oggi, con un calzado excepcional de cuero que nunca defraudó a mi “chico de ojos café”.

De esta manera, me despido querid@s lector@ y ansío que sus próximas compras sean tan inteligentes como atractivas. Porque chicas, (mi último concejo de la columna) tampoco debemos desperdiciar el dinero. Si vamos a adquirir una prenda que ésta nos identifique… esa es la clave. 

La unión del amor y la moda

“Una relación Y.S.L”

Por: Emy Miranda

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Foto: Posando en Y.S.L. Unicenter.

i relación amorosa con el “chico de ojos café” inicio hace casi cuatro años. Mariposas en la panza, latidos fuertes en el corazón y una flecha dorada en el pecho, fueron algunas de la señales para entender que él era el hombre perfecto. Las horas previas a nuestras citas son (y serán) un riguroso y extenso rito de belleza donde la ropa  de mi armario desfila mental y físicamente por toda mi habitación y, como no puede ser de otra forma, nunca es suficiente.

 Ahora bien, ciertos momentos hacen referencia a la evolución conjunta de la pareja y dan indicio a que los intereses individuales de cada uno se convierten en uno común. ¿Por ejemplo? Planear las vacaciones de verano. Ese momento previo, y experimental, a la convivencia. No obstante, otro aún más relevante es ir a comprar ropa con él. Conocer sus gustos y su trato con los vendedores.

Así, luego de deleitarnos con un delicioso menú de pollo frito, en el flamante local de CFC ubicado en el shopping Unicenter, mi galán de barba oscura e intensa, me llevo de paseo por los numerosos locales del centro comercial

.

Y mientras caminábamos, tomados de la mano, mi joven príncipe me pidió que visitemos el sector de Yves Saint Laurent para adquirir una nueva fragancia -seguramente una que me siga enloqueciendo y me incite a querer morderle el cuello cada vez que huela su varonil aroma-. Ahí,  me di cuenta que nuestra pasión por la moda, aún tratándose de estilos completamente diferentes, era el mismo (he aquí otro punto en común).

¿Será cierto que los polos distintos se atraen? ¿O debe existir un punto en común entre ambas personas, ya sea música, moda, tecnología, trabajo o estudio, para conformar una relación duradera? Y si es así, ¿Por cuánto tiempo?

Foto: Perfume L Homme Parfum Intense.

Lo cierto, es que Yves Saint Laurent era nuestro nuevo Cúpido, en cuyo caso, sus flechas aromatizadas con finos aromas nos convirtieron en la pareja perfecta. Aún con nuestros defectos y discusiones, sabemos que el amor compartido, es aún mayor y éste nos permitirá solucionar las futuras tormentas.

Así la fragancia L'Homme Parfum Intense de Y.S.L, de rasgo oriental y amaderada, lanzada en el año 2013, cautivó a mi galán de ojos café por su delicioso aroma dulce ideal para la noche.

Mientras salíamos del shopping con nuevas adquisiciones fashionistas, comencé a imaginar el lugar ideal para estrenar su flamante perfume. 

¿Las personas cambian al igual que la moda?

La Moda cambia y se reinventa: ¿Las personas también?

Por: Emy Miranda

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Foto: De compras en Cabildo y Juamento.

uego de diez días de lluvia, humedad y malestar social, la atmósfera climática de Buenos Aires se recompuso para darle la bienvenida a los primeros días de sol, aún fríos, que marcan el fin del invierno. Lejos quedó ese paisaje inerte, gris y desolado donde podía confundirse el centro porteño con el melancólico paisaje de Inglaterra.

Durante esos días, extraños hechos sucedieron en las calles de la metrópoli, producto del clima hostil y deprimente. No obstante, sólo uno recibe el mérito de ser contado en mi columna personal. Mérito ganado por la relevancia, casi trágica, del hecho en sí. Todos dirán: “¿Emy que te sucedió?” A continuación paso a contarles.

La semana pasada, mientras recorría las vidrieras de Cabildo y Juramento con el objetivo de hallar un nuevo accesorio para lucir en mi próxima cita con mi “chico de ojos café”, decidí revisar mi lista de contactos, en mi celular –acción que no realizaba hace varios años-. De pronto, mientras deslizaba mi dedo y observaba las fotos de los distintos perfiles de WhatsApp, me detengo en la letra “L” y descubro a mi ex novio, alias “chico rebelde”. Nunca borre su número y éste quedó grabado en mi memoria cibernética.

Mi curiosidad por las cosas, en ocasiones, siempre me jugó una mala pasada. Ésta no fue la excepción. Sólo me limito a decir que ese famoso refrán, “La curiosidad mató al gato”, no está muy errado. En definitiva, quise agrandar la imagen de su perfil y, por error, oprimí el botón de ¡LLAMADA! Sí, leyeron bien. Y para empeorar el hecho, mi teléfono se tilda mientras seguía llamando. ¡Un bajón chic@s!

Foto: Madrugada en Belgrano.

Afortunadamente logré colgar antes de que me contestara. Sin embargo, mientras rogaba porque mi número no quedara grabado en su registro, un mensaje de texto puso fin a mis súplicas: “¿Por qué llamaste?”. Tuve que enfrentar la llamada que el joven me “retrucó” al instante.

Y mientras evitaba pisar un charco y manchar mis botas de gamuza negras, Ricky Sarkany, escuche su voz, aniñada pero grave, e intercambiamos un diálogo típico y predecible de dos personas que hacía tiempo no hablaban. Sólo unas corrientes preguntas referidas al trabajo, los estudios y un halago a mi estilo de ropa, integraron la charla.

Al colgar, algunas interrogantes se presentaron. El muchacho que me lastimó sentimentalmente años atrás, producto de su egoísmo y egocentrismo: ¿Había madurado, consecuencia del tiempo y las diferentes vivencias, o era sólo un reinvento de sí mismo para estar “al acecho” una vez más? De todas formas, si algo aprendimos de la moda es que ésta puede reinventarse y modificarse pero siempre vuelve a los esquemas básicos del diseño (Por ejemplo, el estilo Retro). ¿Eso mismo pasa con las personas? ¿El paso del tiempo convierte a

alguien manipulador en un hombre correcto?

Lo cierto, es que luego de intercambiar opiniones con amigas/os, familiares y hasta con mi propio novio, llegue a una conclusión: quizá en las personas podemos modificar ciertas actitudes y pensamientos, pero nuestro carácter o escancia siempre nos definirá.

Aún no sé qué tan sabio vuelve el tiempo a las personas. No obstante, me limité a bloquear a mi contacto, para evitar futuros inconvenientes, y proseguir con mis compras fashionistas.

Obsequios y autoregalos

Obsequios y autoregalos

Por: Emy Miranda

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Foto: Auto-regalos en Prune.

ebo reconocer que agosto, mes lluvioso y nostálgico por naturaleza, es ideal para disfrutar un delicioso capuchino en Starbuck con el objetivo de reflexionar sobre nuestros proyectos a medio concretar o a futuro. No obstante, el “remedio” para curar es clima nostálgico, producto del dinámico transcurso del tiempo, son las numerosas fechas de cumpleaños que posee y sus celebraciones.

El primero de ellos es el de “Megu”, una de mis mejores amigas. El segundo, es el de mi mamá. Mientras que el tercero, y no menos importante, es el de mi amigo, “el programador”, Ivan. Así, el itinerario de las fiestas comenzó con un tour fashionista para adquirir no sólo los obsequios indicados sino también la indumentaria apropiada para concurrir a dichos eventos.

Y ya que me iba a ir de compras, llamé a mi amiga, la primer cumplañera, para recorrer los locales del shopping Unicenter y ponernos al día con los chismes de la semana.  Así, iniciamos un camino por las vidrieras del resplandeciente edificio.

Ahora bien, existen ciertos “tips” a la hora de comprar un presente. Creo que el principal es bajarnos de nuestros altos zapatos Sarkanys para ponernos en el lugar del otro y así, entender los gustos y estilos de la persona a obsequiar. Es decir, mi estilo extravagante y andrógino no está presente al momento de elegir el regalo de mi madre, mujer con impronta elegante pero clásica.

Foto: Recorriendo Unicenter.

Por su parte, nunca olviden la pregunta orientativa: “¿Qué te gustaría para tu cumple?” Sin duda, la interrogante nos abre un abanico de opciones para elegir y sabremos que a nuestro ser querido le agradará nuestro obsequio. Esto evitará los tediosos cambios en las tiendas de ropa.

Fundamental: consultar talles o medidas. Por el contrario, será complicado obtener un resultado positivo en nuestra adquisición. O bien, podemos llevar a una amiga/o que nos oriente en la talla.

Tal y como siempre insisto en mis columnas, al instante de comprar, es importante averiguar los descuentos con nuestras tarjetas de crédito. Les sorprenderá saber que existen descuentos que van desde el quince hasta el treinta por ciento. ¡Ahorraremos una importante suma de dinero!

Y por último, y fundamental, no olviden autoregalarse algún “objeto de deseo”. De todas formas: ¿No merecemos un premio por esa ardua y larga labor? Y aún más importante, es necesario presentarnos a una fiesta con un outfit radiante. 

Rebajas invernales

Rebajas invernales

Por: Emy Miranda

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Foto: Saliendo de compras.

lega el mes de agosto y no sólo el último frío se hace presente, sino también las esperadas “liquidaciones finales”. Por dicho motivo, es muy común observar a los grandes shopping de la ciudad, como así las avenidas comerciales más relevantes de la metropolí, atestadas de chicas fashionistas deseosas de apoderarse de toda prenda que se cruce en su camino.

Siempre tuve una habilidad para las ofertas. Tal vez, un rasgo heredado de las hazañas financieras de una mamá soltera para llegar a fin de mes. Y como no puede ser de otra manera, las rebajas de otoño son mi especialidad. No sólo porque, según mi criterio, la ropa de invernal es la más linda del año debido a la infinidad de accesorios para lucir –tales como pañoletas, boinas, tapados, guantes, ponchos, botas, entre otros- sino porque es en esta agotadora época, en donde transcurrimos la mitad del año, que necesitamos despejarnos mediante un sabio momento de relax con nuestro “fashionista interno”.

Ahora bien, ¿Cuáles son las marcas que dejen sus mercancías de tendencia a un costo muy accesible? Si no contás con demasiado limite en tus tarjetas de crédito te recomiendo que el tour de moda comience por Zara. ¡Nadie puede negar que la ropa de esta etiqueta es hermosa! Y cuando se trata de liquidación, la marca es muy generosa. En lo que a mí respecta, mi primera víctima se visualiza en un tapado de simil piel verde. ¡Una locura!

Foto: Salida nocturna por Cabildo y Juramento.

No obstante, otra de las etiquetas a tener en cuenta en el rubro de abrigos, zapatos y carteras es Prüne y Blaqué. Con precios similares, sabemos que su calidad de cuero es excelente y sus diseños de ensueño. ¡Vale la pena gastar nuestros ahorros en un nuevo bolso!

Por el contrario, si tu nidito de dinero está compuesto por importantes billetes no dudes en visitar Vitamina, Tucci y Akiabara. Todo lo existe en esas legendarias marcas es elegante y maravilloso. Y lo digo por experiencia propia. ¡Cada centavo es una inversión allí!

Y para finalizar, la anhelada “Rickydación”. La época más esperada por las/os amantes de zapatos de extravagante diseño y plataformas con tacos imposibles. Las rebajas llegan hasta el cincuenta por ciento y se acumulan con los descuentos de los bancos. ¡Época ideal para llenar el armario de calzados! Como siempre expreso, los zapatos Sarkany quedan geniales con cualquier outfit. Sin duda, una inversión savia.

Con estos pequeños pero útiles concejos espero que sus armarios estallen de indumentaria y accesorios nuevos. ¡Y no olviden estrenarlos en románticas citas!

Locura Prüne

“Locura Prüne”

Por: Emy Miranda

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Foto: Tapado: Tucci, Collar: Issadora, Zapatos: Prüne.

xisten ciertas “locuras” que, pese a lo que la psicología freudiana detalle en sus teorías, no son necesariamente malas. Está claro que sin éllas, nuestras vidas serían monótonas y aburridas. Y es que a veces necesitamos “dejarnos llevar” por el momento, una “chispa”, romper las cadenas de la rutina y dejar de pensar tanto. Después de todo, sólo se trata de vivir…

La semana pasada mi “yo” interno elevó mi estado mental por los cielos

y me incito a cometer una “locura fashionista”. El escenario ideal para cometer tal crimen fue el mítico shopping Unicenter, destacado por su larga extensión edilicia y sus infinitas etiquetas. Si no encontrás lo que buscas allí es probable que ¡no exista!

Y en ese fántastico “nirvana” de marcas, accesorios, bolsos e indumentaria encontré lo que buscaba en la tierra prometida de Prüne. ¿Les mencioné que es uno de mis lugares preferidos de la ciudad? Siempre huele bien, se ve radiante y todo lo exhibe es hermoso.

Con la excelente atención de una amable y paciente vendedora, encontré lo que buscaba: un hermoso par de botas, de piel negra, taco y plataforma. ¡No pude resistirme! Y luego de probármelos, hallé una hermosa cartera de cuero dorado, con flecos en sus laterales, que se convirtió en la pareja ideal de mis nuevos zapatos.

Foto: Relax, luego de un día de compras.

Sin duda, esos objetos de deseo enloquecerían a cualquier fashionista. Así, mi locura se desató y me incentivó a concretar mi compra. ¿El resultado? Felicidad absoluta y, en consecuencia, un golpe a mis tarjetas de créditos, recargadas por compras pasadas, muy necesarias.

No obstante, la mejor parte de adquirir indumentaria y accesorios nuevos consiste, sin duda alguna, en estrenarlos. ¿Cómo? Mi escenario preferido es una cita romántica con tu novio. Sorprenderlo, reinventarse, quererse a uno mismo, mimarnos, son algunos de los motivos al momento de renovar mi guardarropa.

          De esta forma, una vez más, Prüne, etiqueta de excelente calidad y delicados diseños, logró cautivarme y satisfacer mi instante de demencia. La gran interrogante es: ¿Cuál será la siguiente en lograrlo?

"Prince Charming"

El príncipe azul del siglo XXI

Por: Emy Miranda

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Foto; Esperando al "chico de ojos café" en Dot.

oda persona que disfrutó su infancia, recuerda los cuentos mágicos y sobrenaturales que sus padres les contaron de niños, al momento de dormir. Mejor aún, todas las chicas y gays de la ciudad, recuerdan esos hermosos relatos donde un caballero rescata a la princesa del dragón para vivir por siempre felices en un hermoso palacio. Ahora bien, es normal preguntarse, al crecer y luego de varios fracasos amorosos y diferentes experiencias cotidianas: ¿Qué tan factible es encontrar a ese socorrista encantador? ¿En verdad existe?

Mi respuesta es afirmativa. Lo encontré hace casi cuatro años. Es fenomenal, apasionado y hermoso. No obstante, no se dejen engañar por los viejos relatos. El príncipe azul ya no viene en caballo, con un peinado retro o un gran jopo, ni con fijador en el cabello. Ni siquiera viste de azul. En la actualidad, el mítico caballero, que tiene como objetivo hacer feliz a cualquier diva fashionista, tiene un look más chic.

Las camisas holgadas y las hombreras fueron reemplazadas por elegantes camisas entalladas de Desigual, Vete al Diablo o Tascani. Los pantalones lisos y anchos ya pasaron a otro plano. Ahora, los chupines varoniles, que por cierto, nos dejan apreciar lindos detalles a la vista producto de sus dotes físicos, son protagonistas en sus outfit.

Foto: Zapatos de ensueño de Sarkany.

Y es que el príncipe azul, ahora, se preocupa más por su imagen y eso ¡nos encanta! Con su perfume de Yves Saint Laurent, mi “chico de ojos café” me cautiva en cada cita. Ya sea con sus zapatos de Oggi, de Casella Uomo o con sus borsegos de Ricky Sarkany, siempre está elegante y atractivo.

Es por eso que las “Divas” y princesas debemos esforzarnos más en los encuentros románticos. Ya no basta con una simple hora para preparar todas nuestras prendas y accesorios, sino que necesitamos tres para probarnos cuatro, o quizá cinco veces, las posibles combinaciones de nuestros outfits.

Otro aspecto a destacar, es que nuestro galán encantador del nuevo milenio ya no se preocupa por traernos bombones empalagosos o un ramo de flores. Es consciente que el chocolate en exceso nos deforma la figura que tanto cuidamos, como también sabe que una planta natural tiene poca esperanza de vida en nuestros hogares.

No obstante, el romanticismo nunca deja de existir debido a que éste es parte de él. Por eso, el “chico de ojos café” deja los clichés de lado y opta por comprarme mis zapatos preferidos de Ricky Sarkany. Sin importar cuantos kilómetros deba recorrer en su larga travesía o cuantos cíclopes vencer, mi caballero de armadura siempre sabe lo que quiero.

Foto: Regalo de amor.

Por dicho motivo, no me sorprendió que recorriera más de tres sucursales y viajara desde el shopping Unicenter hasta el Abasto, para adquirir el maravilloso par de botas “Najac”, pero esta vez en color negro, que tanto deseaba. ¡Y es que cuando a una Diva le gusta mucho un modelo de zapato debe tenerlo en todas sus variantes y colores!

Entonces: ¿Quién necesita una caja de bombones cuando se puede tener un elegante objeto de deseo? Es un hecho, los príncipes de los cuentos de hadas existen. Sólo que evolucionaron y para bien. Por dicho motivo, cuando encuentren uno, no lo dejen ir. Ámenlo y valoren cada cita con él. De todas formas, mi esplendor fashionista sólo cobra sentido cuando estoy con mi “chico de ojos café”.  

"I´m a Diva"

La difícil labor de ser una “Diva”

Por: Emy Miranda

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Foto: Diva comprando en Tucci.

n la glamorosa ciudad de Buenos Aires  ser una “diva” es una labor muy difícil de implementar. Ahora bien ¿En que consiste ser una? Al igual que las princesas de los cuentos de hadas, las “divas” deben verse bien a toda hora del día, ya sea en el mercado chino o la panadería que se encuentra frente a su edificio. No existen las zapatillas en su mundo ¿Cómo se camina con eso? No obstante, se le dice sí a los zapatos de taco y plataforma alta de Ricky Sarkany.

Nuestro cabello siempre debe estar en condiciones. Hidratado, brilloso y sin puntas florecidas… ni raíces. ¡Qué horror! No obstante, desde luego que existen ciertos “tips” o “salvavidas” que nos socorren cuando no tenemos el tiempo suficiente para implementar ese necesario plan de belleza.

¿Cuáles son? El primero de ellos, útil para cualquier princesa de pelo largo (y rubio), consiste en utilizar un broche, o una colita, para recogernos el cabello cuando, luego de los cocteles de la noche anterior, debemos presentarnos en una reunión familiar con nuestra suegra.

Segundo tip: lentes de sol, grandes y cubritivos, lo suficiente para tapar las ojeras producto de fiestas pasadas o, por qué no, exámenes pasados. Después de todo, las “divas” también estudian en la universidad para asegurar su futuro y ser independientes.

Tercer y último tip: el make up! Siempre tengan en su cartera una base, de buena calidad, que coincida con su tono de piel y cubra esas pequeñas imperfecciones, producto de nuestro dinámico estilo de vida.

Foto: Junto a lector@s de "Emy Miranda".

Ahora bien, luego de tantas auto exigencias, ustedes se preguntarán ¿Y cuáles son los beneficios de ser una “Diva”? Tal vez, el hecho de que sabemos lo que queremos y, al definir nuestro estilo (ya sea glamoroso, andrógino, extravagante), enfrentamos los desafíos de nuestra cotidianeidad con sutileza y, lo que es mejor, siempre salimos victoriosas, sin ensuciarnos nuestros delicados zapatos.

Nuestras carteras son la envidia de muchas mortales a las cuales miramos con indiferencia cuando intentan sabotear nuestro outfit con su mala onda. ¿A caso no saben que una diva jamás se rebaja a peleas vulgares?

Sin embargo, existe una ocasión en donde este glamoroso ser, se descalza de sus Sarkany y se dispone a lo que sea. Y esto sólo sucede cuando se trata de proteger a su hombre amado. Quizá esa sea la verdadera kriptonita de una “Diva”.

O tal vez, observando la situación de otro ángulo, no se trate de una debilidad sino de todo lo contrario. El amor es nuestro punto de fortaleza, que nos levanta cuando perdemos un zapato y caemos en la pasarela. En otras palabras, sólo podemos ser una “Diva” si sabemos quiénes somos y, en mi opinión personal, si mi “chico de ojos café” se encuentra siempre a mi lado.

Situaciones de amor y dolor

Masoquismo: ¿Más habitual de lo que pensamos?

Por: Emy Miranda

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s un hecho. La implementación de actividades y situaciones masoquistas, en algunas relaciones amorosas, es tan habitual como ir a la peluquería a retocarse el cabello, o cambiar el look, antes de una cita romántica.

Foto: De compras en mi avenida favorita.

No obstante, mientras que me aferro al rechazo del pensamiento sado masoquista, debido a que no encuentro satisfacción en lastimar a la persona que amo y aún teniendo respeto por las parejas que lo encuentran como un elixir, no sólo para consumar el hecho sexual sino para su cotidianidad, me detuve un momento a pensar: ¿Acaso no todos somos

masoquistas en algún punto de nuestras vidas? ¿Es tan radical el pensamiento negativo hacia esta práctica tan milenaria como los zapatos de taco alto?  ¿O estamos utilizando la negación como una amiga para ocultar ciertas actitudes atractivas a cierto dolor?

Revisando algunos sucesos particulares de mi vida, encontré hechos que sin duda rondan en el campo del masoquismo. ¿Por ejemplo? El primero en mi lista: “Ir al shopping cuando sabés bien que no podes gastar más”. Es una situación tan dolorosa como placentera concurrir a un centro comercial, aún sabiendo que tus tarjetas de crédito están por llegar al límite, para observar las ofertas y descuentos en indumentaria. Y lo que es aún peor (segundo momento) es que, teniendo en cuenta tu mal momento financiero, te encojes de hombros y decís: “Sólo esta prenda, total el mes que viene me cuido”… ¡Y la compras! Sin embargo, en los siguientes treinta días vas a tener que restringir tu dieta a sólo arroz y pepinos.

El tercer momento de “dolor exquisito” se relaciona cuando, luego de pelear con tu novio y cortar el teléfono rotundamente de forma testaruda, te distancias y te mordés las uñas para no llamarlo. Peor todavía, si él tiene la razón. “¿Por qué debería llamarlo primero?” Y así, se produce el famoso “tire y afloje” masoquista en dónde deseas escuchar su voz pero el ego que tenemos dentro nos lo impide.   

Y para finalizar, el cuarto momento necesario y doloroso: “Calzarte esos hermosos zapatos que combinan genial con tu outfit de noche pero que, en el periodo de tres horas te van a apretar o sacar ampollas”. Aguantamos el dolor y ponemos carita de Barbie mientras que por dentro estamos insultando a todos los santos. ¿A quién no le paso?

Entonces, luego de un análisis breve pero profundo sobre dichas situaciones conflictivas llegué a la hipótesis de que, pese a todas las controversias y polémicas que produzca, el masoquismo siempre estará rondando nuestras vidas. Ya sea en un shopping, en un novio, o en la cama. Esta en cada persona aferrarse a él o sólo dejarlo ir. 

La mística de Tucci

Tucci: la tierra prometida

Por: Emy Miranda

E

Foto: En el probador con mi tapado.

n las historias medievales, religiones, mitos y leyendas, por lo general, siempre se menciona a una tierra mágica, codiciada y reconfortante. Un espacio o isla, nunca antes visto, que es poseedora de los tesoros más codiciados y metales brillantes. No obstante, este suelo prometido sólo espera, con los “brazos abiertos”, a todos aquellos

que batallaron arduamente y con honor, a lo largo de de su vida.

Mientras que algunos arqueólogos, piratas y chamanes, se desesperan, aún hoy en día, por hallar ese hermoso lugar paradisíaco habitado por seres hermosos y piedras preciosas, debo confesarles que yo lo encontré. Se llama Tucci y se encuentra dividido en parcelas, llamadas locales, a lo largo de la ciudad de Buenos Aires.

En esta tienda las afamadas “sirenas” se llaman vendedoras y atienden a todos los afortunados viajeros de la manera más cálida y con una buena asesoría de imagen.

Además, esta fantástica etiqueta envuelve los diseños más elegantes y originales ya que se encuentran modelos clásicos como extravagantes. ¿Y cuál de las dos opciones fue mi objetivo? Por supuesto, la segunda.

Inmerso en ese mar de objetos preciosos -compuesto por accesorios, jeans, blazer, sweters,  blusas, entre otros - lo único que deseaba era quedarme en esa mágica tierra prometida o, en consecuencia,  llevarme todo lo que pudiera a casa.

Foto: Saliendo de Tucci

Sin embargo, me detuve y al apreciar las nuevas prendas de la temporada, un destello de luz se desprendió de la vidriera.  Una luz que me llamaba, como si fuese un faro resplandeciente en medio de un oscuro mar atestado por niebla en cuyo caso yo era un pequeño barco velero guiado por el destello.

Levanté la mirada y ahí estaba: un hermoso tapado de piel rosa. Por donde lo mire era perfecto, delicado y original. ¡Todo un sueño hecho realidad! Y como si fuera poco, la “isla paradisíaca” me ofreció un importante descuento por abonar con mi tarjeta de crédito Visa. ¿Acaso podía exigir algo más?

Sin titubear y luego probarme varias prendas de Tucci, me decidí por el glamoroso y rozagante abrigo de piel. Decidí que era perfecto para estrenar en una cita romántica con mi “chico de ojos café” y así, sorprenderlo una vez más.

De todas formas, se dice que la clave de una relación duradera, es reinventarse y sorprenderse todo el tiempo y así nunca perder la magia, el brillo, el deseo y la mística de las “primeras citas”. 

Distancia: ¿Amiga o enemiga?

Lejos… ¿Estamos mejor?

Por: Emy Miranda

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Foto; Outfit de nuestra cita-reencuentro. 

a semana pasada escuche a una psicóloga, experta en parejas y conflictos amorosos, decir que una de las claves para una relación duradera y armoniosa consiste en que las personas involucradas en dicha unión afectiva tomen una distancia prudente. ¿De cuánto tiempo? Aproximadamente una semana. ¿Por qué? El objetivo fundamental es que, durante ese periodo se genere un sentimiento de “vacio” afectivo y los individuos reflexionen sobre sus temores y conflictos para hallar una solución.

En cuanto termine de escuchar ese argumento, en principio convincente, mi mente comenzó a cuestionar la idea del distanciamiento propuesta por la licenciada. ¿Se trataba de un simple mito, en cuyo caso las parejas atormentadas por la rutina se alejan la una a la otra y, al volver, no encuentran una solución o era un concejo tan real, como factible, que todo noviazgo debía tomar con el objetivo de fortalecer su relación?

De forma sorprendente y para poner a prueba la hipótesis de la especialista, mi “chico de ojos café” se sometió a un inesperado “exilio”, ya que debía filmar un corto para su último año de facultad, donde él tomaba protagonismo como guionista y director de la película. Así, inicio la larga, larga espera…

El primer día lo soporte muy bien. Miré mis series favoritas, visité todas las páginas de las  etiquetas más destacas de moda para ver que podía adquirir de nuevo y hablé con mis amigas para distraerme.

El segundo y tercer día, comenzaron las típicas dudas. ¿Qué estará haciendo ahora? ¿Pensará en mí? ¿Le llamo o mejor le escribo? Con temor a sonar trillado, los minutos me parecieron horas. Ordene todas mis blusas, jeans, tapados, carteras, accesorios y zapatos. Aún así el tiempo trascurría lentamente.

Para el cuarto y quinto día (más allá de las llamadas y los textos de whatsapp que me enviaba diariamente) me vi a mismo en la versión más “emo”, escuchando los temas lúgubres y tristes de Evanescence. Pensaba en él todo tiempo. Sin embargo, me mordía las uñas –sin dañar el manicure- para no convertirme en la típica “novia histérica y celosa”.

En medio de esa crisis de tensión, incertidumbre, angustia, inseguridades me pregunté: ¿Qué tan positivo era ese “distanciamiento” en una relación amorosa? ¿Era necesario padecer todos esos sentimientos poco gratos para un “supuesto” reencuentro sensacional? ¿El resultado lo valía?

De todas formas, era como guardar en el clóset esos hermosos zapatos Ricky Sarkany que compraste con un gran descuento, con los que viviste situaciones inolvidables y quedan bien con cualquier outfit. ¿Por qué padecer semejante martirio?

Quizá estoy mal “programado” y a lo que pareciera que a algunas relaciones les favorece, a mí me juega en contra.

Lo cierto, es que no todas las personas son iguales. En consecuencia, no a todos les funcionará el mismo concejo.

Día siete: acordamos una cita luego de una extensa espera. Y como si fuera una primera cita, tarde horas en elegir mi vestuario, la fragancia y los accesorios.

Cuando lo ví a mi galán de ojos café lo noté distinto. ¿Había crecido más? ¿O ejercitó su musculatura? Tal vez si haya algo benéfico en lo que dijo la doctora. No obstante, yo prefiero tenerlo siempre cerca de mí. 

Medicina Moderna

La nueva medicina moderna

Por: Emy Miranda

E

Foto: Posando con mi nueva cartera de Blaquè.

n la ciudad de Buenos Aires, cuando los transeúntes se encuentran agobiados por el trabajo, el estudio, la universidad, o por las malas decisiones tomadas a lo largo de la vida, existen muchas formas de tocar fondo. ¿Por ejemplo? Comprar e ingerir comida chatarra hasta más no poder, llegar al límite con todas las tarjetas de crédito, o bien, volver a contactar a un ex novio. ¿Algo de todo esto les suena familiar?

Resulta que, probablemente, todos hayamos pasado por una determinada situación que nos llevó al borde del abismo, a llevar a cabo esa típica conducta “autodestructiva” hacia nosotros mismos y a tomar ciertas decisiones sin medir las consecuencias.

No obstante, si algo nos demostró la Historia y las distintas revoluciones desarrolladas en los siglos pasados, es que las “crisis” son importantes para crear “algo” nuevo y mejor. De esta forma, y bajando al campo de la Moda, amigos diseñadores de indumentaria me comentan que en varias ocasiones, en su etapa pre-entrega de vestuario, sufren el miedo de todo profesional fashionista: la falta de creatividad.

Algunos toman tres baños diarios, otros se relajan en la sesión de masajes y spa más cara de la ciudad, mientras que ciertas personas deciden tomar una larga siesta con la finalidad de recargar energías y revivir, una vez más, las extenuantes neuronas de sus cerebros. Así, luego del merecido receso y de una avalancha de cafés, hallan la inspiración al enfrentar sus miedos y momentos más difíciles.

Foto: En  Dot Baires, con mi bolsa.

En lo que a mí respecta, cuando mi día se torna difícil y su color “rosa” comienza a tornarse “gris”, existe un tono que supera mis angustias y cura todos mis estados: el marrón de sus ojos café.

Y cuando ya me encuentro mejor, cuando la calidez de su abrazo me envuelve y me llena de energía, vuelvo a ser yo. Un escritor amante de la moda que busca los mejores outfits para sus citas románticas.

Entonces, cuando un encuentro amoroso se presenta y necesito estrenar un lindo bolso nuevo, elijo a Blaquè, una etiqueta que nunca me falla por su excelente calidad. En esta ocasión encontré una hermosa cartera negra de cuero texturado, con un estilo único que combina perfectamente con mi flamante tapado de leopardo. (Leáse “Leop

ardo urbano”).

Al salir de la tienda y saludar a mis amables amigas de trajes negros, entendí que una persona especial en combinación con tu pasión pueden mejorar no sólo un día cotidiano, sino también una larga y divertida vida.

Tal vez, lo importante no consiste en focalizarnos en nuestros errores, defectos y malestares pasados, sino concentrarse y retomar el rumbo de nuestro camino ¿Hacia dónde? Hacia “quienes deseamos ser”. Y no existe nada mejor que recorrer esa extensa travesía junto a la compañía de tu familia y de, si tenés la suerte de encontrarlo, tu gran amor.

Leopardo Urbano

“Permitidos” que nos llenan el alma

Por: Emy Miranda

M

Foto: Abriendo la puerta para ir a comprar.

uchas personas, cuando se encuentran en medio de un riguroso régimen alimentario para bajar esos kilitos de más que le sientan algo incómodo, se permiten, de vez en cuando, un “permitido”. Si bien no soy de las personas que se restringen al momento de comer, admito que me doy ciertos “permitidos” que me satisfacen más que cualquier platillo ostentoso.

Y es que mi “paréntesis” no se relaciona con los alimentos sino con aquella pasión que me despierta cada día y me dice: “!Emy levantáte y salí a conquistar la pasarela urbana!”, es decir, la moda.

En la transición de un difícil momento financiero, producto del uso constante de mis seis tarjetas de crédito, y en cuyo caso debería implementar un necesario “ajuste de cinturón”, decidí romper el duro “régimen” de abstinencia comercial y tomar las riendas del estilo y la tendencia.

Además, cuando el otoño llega con su clima frío y el invierno empieza a realizar su aparición, es el momento de mirar las vidrieras de tus etiquetas favoritas y observar que te ofrecen en materia de abrigos y en cuestión de tapados de piel, es decir, mi gran “antojo”.

Es por eso que, siempre que busco estilo, calidad y rebeldía elijo a Complot. Una excelente boutique que, como de costumbre, lanza una temporada otoño-invierno fantástica, con hermosos jeans, calzas,  sweaters y accesorios de bellísimos diseños.

Foto: Emy Miranda x 2!

Ahora bien, dicen que toda persona tiene un instinto animal dentro de su ser, y que éste define su carácter y su forma de vestir. Tal vez, una clásica madre sobre protectora posee, en su interior, la fuerza salvaje de una loba; quizá un sujeto usurero y oportunista (sí, que los hay) posee el rasgo heredado de un buitre carroñero. Es probable que todos, tengamos un rasgo animal, que nos fortalece en ciertos aspectos, dentro de nuestra psique.

Y así, muchos se preguntarán: “¿Qué animal te define Emy Miranda?” El leopardo, sin duda alguna. Uno de los felinos más extravagantes y hermosos del reino animal. Tan bello como imponente. Y por dicho motivo, al momento de concretar mi “permitido” elegí un tapado animal print, de la nueva colección de Complot,  que rinda tributo a este fantástico animal.

Así, con este soñado objeto de deseo rompí mi “dieta” e inicie una nueva búsqueda por flamantes outfits, que alimenten mi estilo ecléctico, y se unan a las maravillosas prendas de mi clóset. 

Su patente aroma a Saint Laurent

Todo está implantado en la memoria

Por: Emy Miranda

E

Foto: Día de shopping.

s muy frecuente que, al viajar por la metrópoli porteña, ciertas estaciones de subte, calles y horas te recuerden momentos importantes. Una cita romántica, un ex novio, un difícil día de facultad, o la primera vez que compraste esos zapatos que te enloquecieron. Al analizar los diferentes sucesos que marcan la vida de una persona fashionista, encontré uno que, particularmente, guardo en mi memoria gran aprecio: mi primer beso con “el chico de ojos café”.

Luego de varios errores amorosos previos, una noche mágica llena de mística gay revoloteando en el aire, mis amigos me convencieron de ir a un bar muy popular entre los chicos de veintitantos. Sin ánimos de sociabilizar con gente opuse resistencia pero luego pensé: ¿Por qué no estrenar un nuevo outfit en una excitante salida nocturna? Y mejor aún, cuando un joven que me escribía hace unos meses, dejó la timidez de lado y me citó para encontrarnos. Así, sin más preámbulos, viaje a mi destino sin pensar que conocería a una persona muy especial. 

Foto: Feliz con mis compras fashionistas.

En medio de una oscura profundidad, no sólo emocional por mi previo rompimiento, sino literal ya que el ambiente del bar era muy lúgubre, lo ví. Vestido de forma elegante y con un elocuente conjunto negro de jeans y remera. ¡Me impacto de inmediato! Pero no le sería tan fácil. Si él era un tiburón debía esforzarse para atrapar a su presa.

Sin embargo, todo mi plan se derrumbó de inmediato cuando, al abrirse paso entre la multitud y acercarse para saludarme, me derritió con su exquisito aroma. Inconfundible y atractiva, su fragancia de Yves Saint Laurent L’Homme Libre, me cautivó como si fuese un príncipe encantador, en cuyo caso yo era una extravagante princesa de ensueño con perfume de Carolina Herrera. ¿A caso los dioses de la alta costura deseaban unirnos? ¿Una señal del destino o una simple, pero oportuna, coincidencia?

Foto: Yves Saint Laurent L’Homme Libre.

Y así, en la penumbra del boliche, nos besamos… por un largo tiempo, que parecieron segundos. Ambos sabíamos que una conexión nos unió en ese preciso momento. Meses después, empezaríamos un cálido noviazgo.

Lo cierto, es que la Ciudad de Buenos Aires, siendo una de las capitales latinoamericanas más destacadas en Moda, posee un rasgo aún más atrapante para toda la comunidad fashionista que vive en ella: la capacidad de enamorar a las personas. Y ese aspecto, pese a todos los contras que la metrópoli tenga, la convierte en un sitio ideal para empezar una hermosa historia de amor. Y ustedes, ¿Qué esperan para iniciar la propia?