sábado, 30 de mayo de 2015

Distancia: ¿Amiga o enemiga?

Lejos… ¿Estamos mejor?

Por: Emy Miranda

L
Foto; Outfit de nuestra cita-reencuentro. 
a semana pasada escuche a una psicóloga, experta en parejas y conflictos amorosos, decir que una de las claves para una relación duradera y armoniosa consiste en que las personas involucradas en dicha unión afectiva tomen una distancia prudente. ¿De cuánto tiempo? Aproximadamente una semana. ¿Por qué? El objetivo fundamental es que, durante ese periodo se genere un sentimiento de “vacio” afectivo y los individuos reflexionen sobre sus temores y conflictos para hallar una solución.

En cuanto termine de escuchar ese argumento, en principio convincente, mi mente comenzó a cuestionar la idea del distanciamiento propuesta por la licenciada. ¿Se trataba de un simple mito, en cuyo caso las parejas atormentadas por la rutina se alejan la una a la otra y, al volver, no encuentran una solución o era un concejo tan real, como factible, que todo noviazgo debía tomar con el objetivo de fortalecer su relación?

De forma sorprendente y para poner a prueba la hipótesis de la especialista, mi “chico de ojos café” se sometió a un inesperado “exilio”, ya que debía filmar un corto para su último año de facultad, donde él tomaba protagonismo como guionista y director de la película. Así, inicio la larga, larga espera…

El primer día lo soporte muy bien. Miré mis series favoritas, visité todas las páginas de las  etiquetas más destacas de moda para ver que podía adquirir de nuevo y hablé con mis amigas para distraerme.

El segundo y tercer día, comenzaron las típicas dudas. ¿Qué estará haciendo ahora? ¿Pensará en mí? ¿Le llamo o mejor le escribo? Con temor a sonar trillado, los minutos me parecieron horas. Ordene todas mis blusas, jeans, tapados, carteras, accesorios y zapatos. Aún así el tiempo trascurría lentamente.

Para el cuarto y quinto día (más allá de las llamadas y los textos de whatsapp que me enviaba diariamente) me vi a mismo en la versión más “emo”, escuchando los temas lúgubres y tristes de Evanescence. Pensaba en él todo tiempo. Sin embargo, me mordía las uñas –sin dañar el manicure- para no convertirme en la típica “novia histérica y celosa”.

En medio de esa crisis de tensión, incertidumbre, angustia, inseguridades me pregunté: ¿Qué tan positivo era ese “distanciamiento” en una relación amorosa? ¿Era necesario padecer todos esos sentimientos poco gratos para un “supuesto” reencuentro sensacional? ¿El resultado lo valía?

De todas formas, era como guardar en el clóset esos hermosos zapatos Ricky Sarkany que compraste con un gran descuento, con los que viviste situaciones inolvidables y quedan bien con cualquier outfit. ¿Por qué padecer semejante martirio?

Quizá estoy mal “programado” y a lo que pareciera que a algunas relaciones les favorece, a mí me juega en contra.

Lo cierto, es que no todas las personas son iguales. En consecuencia, no a todos les funcionará el mismo concejo.

Día siete: acordamos una cita luego de una extensa espera. Y como si fuera una primera cita, tarde horas en elegir mi vestuario, la fragancia y los accesorios.


Cuando lo ví a mi galán de ojos café lo noté distinto. ¿Había crecido más? ¿O ejercitó su musculatura? Tal vez si haya algo benéfico en lo que dijo la doctora. No obstante, yo prefiero tenerlo siempre cerca de mí. 

martes, 19 de mayo de 2015

Medicina Moderna

La nueva medicina moderna

Por: Emy Miranda

E
Foto: Posando con mi nueva cartera de Blaquè.
n la ciudad de Buenos Aires, cuando los transeúntes se encuentran agobiados por el trabajo, el estudio, la universidad, o por las malas decisiones tomadas a lo largo de la vida, existen muchas formas de tocar fondo. ¿Por ejemplo? Comprar e ingerir comida chatarra hasta más no poder, llegar al límite con todas las tarjetas de crédito, o bien, volver a contactar a un ex novio. ¿Algo de todo esto les suena familiar?

Resulta que, probablemente, todos hayamos pasado por una determinada situación que nos llevó al borde del abismo, a llevar a cabo esa típica conducta “autodestructiva” hacia nosotros mismos y a tomar ciertas decisiones sin medir las consecuencias.

No obstante, si algo nos demostró la Historia y las distintas revoluciones desarrolladas en los siglos pasados, es que las “crisis” son importantes para crear “algo” nuevo y mejor. De esta forma, y bajando al campo de la Moda, amigos diseñadores de indumentaria me comentan que en varias ocasiones, en su etapa pre-entrega de vestuario, sufren el miedo de todo profesional fashionista: la falta de creatividad.

Algunos toman tres baños diarios, otros se relajan en la sesión de masajes y spa más cara de la ciudad, mientras que ciertas personas deciden tomar una larga siesta con la finalidad de recargar energías y revivir, una vez más, las extenuantes neuronas de sus cerebros. Así, luego del merecido receso y de una avalancha de cafés, hallan la inspiración al enfrentar sus miedos y momentos más difíciles.

Foto: En  Dot Baires, con mi bolsa.
En lo que a mí respecta, cuando mi día se torna difícil y su color “rosa” comienza a tornarse “gris”, existe un tono que supera mis angustias y cura todos mis estados: el marrón de sus ojos café.
Y cuando ya me encuentro mejor, cuando la calidez de su abrazo me envuelve y me llena de energía, vuelvo a ser yo. Un escritor amante de la moda que busca los mejores outfits para sus citas románticas.

Entonces, cuando un encuentro amoroso se presenta y necesito estrenar un lindo bolso nuevo, elijo a Blaquè, una etiqueta que nunca me falla por su excelente calidad. En esta ocasión encontré una hermosa cartera negra de cuero texturado, con un estilo único que combina perfectamente con mi flamante tapado de leopardo. (Leáse “Leop
ardo urbano”).

Al salir de la tienda y saludar a mis amables amigas de trajes negros, entendí que una persona especial en combinación con tu pasión pueden mejorar no sólo un día cotidiano, sino también una larga y divertida vida.


Tal vez, lo importante no consiste en focalizarnos en nuestros errores, defectos y malestares pasados, sino concentrarse y retomar el rumbo de nuestro camino ¿Hacia dónde? Hacia “quienes deseamos ser”. Y no existe nada mejor que recorrer esa extensa travesía junto a la compañía de tu familia y de, si tenés la suerte de encontrarlo, tu gran amor.

martes, 12 de mayo de 2015

Leopardo Urbano

“Permitidos” que nos llenan el alma

Por: Emy Miranda

M
Foto: Abriendo la puerta para ir a comprar.
uchas personas, cuando se encuentran en medio de un riguroso régimen alimentario para bajar esos kilitos de más que le sientan algo incómodo, se permiten, de vez en cuando, un “permitido”. Si bien no soy de las personas que se restringen al momento de comer, admito que me doy ciertos “permitidos” que me satisfacen más que cualquier platillo ostentoso.

Y es que mi “paréntesis” no se relaciona con los alimentos sino con aquella pasión que me despierta cada día y me dice: “!Emy levantáte y salí a conquistar la pasarela urbana!”, es decir, la moda.

En la transición de un difícil momento financiero, producto del uso constante de mis seis tarjetas de crédito, y en cuyo caso debería implementar un necesario “ajuste de cinturón”, decidí romper el duro “régimen” de abstinencia comercial y tomar las riendas del estilo y la tendencia.

Además, cuando el otoño llega con su clima frío y el invierno empieza a realizar su aparición, es el momento de mirar las vidrieras de tus etiquetas favoritas y observar que te ofrecen en materia de abrigos y en cuestión de tapados de piel, es decir, mi gran “antojo”.

Es por eso que, siempre que busco estilo, calidad y rebeldía elijo a Complot. Una excelente boutique que, como de costumbre, lanza una temporada otoño-invierno fantástica, con hermosos jeans, calzas,  sweaters y accesorios de bellísimos diseños.

Foto: Emy Miranda x 2!
Ahora bien, dicen que toda persona tiene un instinto animal dentro de su ser, y que éste define su carácter y su forma de vestir. Tal vez, una clásica madre sobre protectora posee, en su interior, la fuerza salvaje de una loba; quizá un sujeto usurero y oportunista (sí, que los hay) posee el rasgo heredado de un buitre carroñero. Es probable que todos, tengamos un rasgo animal, que nos fortalece en ciertos aspectos, dentro de nuestra psique.


Y así, muchos se preguntarán: “¿Qué animal te define Emy Miranda?” El leopardo, sin duda alguna. Uno de los felinos más extravagantes y hermosos del reino animal. Tan bello como imponente. Y por dicho motivo, al momento de concretar mi “permitido” elegí un tapado animal print, de la nueva colección de Complot,  que rinda tributo a este fantástico animal.


Así, con este soñado objeto de deseo rompí mi “dieta” e inicie una nueva búsqueda por flamantes outfits, que alimenten mi estilo ecléctico, y se unan a las maravillosas prendas de mi clóset.